El 16 de Febrero de 2005 entró en vigor el Protocolo de Kyoto. Es el único tratado internacional de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera (CO2, metano, óxido nitroso y varios gases fluorados). Esta es su mayor virtud, porque su objetivo es muy modest una reducción de las emisiones de los países industrializados del 5% de lo que emitían en 1990, y debe alcanzarse entre 2008 y 2012.