“La agricultura moderna ha traído un incremento significativo de la producción de alimentos, pero sus beneficios han sido desiguales y han significado un alto coste para los pequeños agricultores, las comunidades rurales y el medio natural”, asegura un informe auspiciado por la ONU y en el que han participado 400 expertos en ciencia y tecnología para el desarrollo agrícola.Según este documento que se acaba de publicar, los países en desarrollo son los “perdedores” en los escenarios del libre comercio y, para cambiar esta realidad, debería ponerse en marcha medidas políticas que también tengan en cuenta los recursos como el agua, los bosques y la biodiversidad. De momento, campesinos y campesinas de todo el mundo ya se organizan y llevan a cabo acciones para pedir cambios: