Y es que la Argentina exporta al menos 50 mil toneladas de los cuatro cortes más caros y, en medio del lock out agrario, los empresarios europeos entraron en pánico por miedo a sufrir un importante desabastecimiento. Temor que fue reflejado en los precios, que en el caso de los cortes Hilton se dispararon un 15%.Los exportadores, en tanto, evalúan alternativas para no perder los beneficios de la cuota y, a su vez, no incumplir los compromisos. El asesor Victor Tonelli dijo que una solución podría ser sumar la nalga, la bola de lomo y el peceto a los envíos de los mejores cuatro cortes (bife ancho, angosto, lomo y cuadril).De esta manera, se aprovecharía un 25% más el animal y se adelantaría tiempo pudiendo acelerar las entregas. Y también evaluaron hacer envíos en avión para agilizar los embarques.