
Aseguran que año tras año se devuelven millones a Europa de las subvenciones recibidas y proponen, en el caso de la ganadería, que el reparto de las subvenciones se haga en dos pagos como se hace en determinados sectores de la agricultura. Además están convencidos de que si se incrementasen en un 20% los fondos del Programa de opciones específicas por el alejamiento y la insularidad (Posei) podría paliarse la crisis del sector y evitar devoluciones millonarias a Bruselas.