La agricultura en Fuerteventura vive un presente desarticulado y en crisis

“Es complicada la situación actual en el sector primario, y la coyuntura internacional no ayuda en estos momentos”, así comienza, y continúa afirmando, “siempre hemos tenido crisis en el sector primario en Canarias, donde siempre ha sido un sector débil”. Y de Canarias, concreta sobre Fuerteventura, “la agricultura es un sector que en su día estuvo muy bien organizado con cooperativas. Hoy, aún existe una cooperativa que sigue operando con Europa, que es la Cooperativa Agrícola de Gran Tarajal, pero aún no ha desarrollado estructuras para organizar la agricultura de cara al mercado interior”. Mesa concreta aún mas, y de Canarias a Fuerteventura, y de Fuerteventura al tomate. “Todo viene encadenado a una descapitalización del sector, motivado sobre todo por la dificultad del tomate. Gran Canaria, Tenerife, y Fuerteventura son tres islas que todavía exportan tomate a Europa, y generan una economía importante, aunque la situación no es muy halagüeña”.Entre las debilidades que expone Mesa, no sólo plantea las estructurales y de organización, sino también las trabas y costes de conseguir permisos y licencias para desarrollar sus actividades; o el abastecimiento y gestión del agua tanto cara a la agricultura, como a la ganadería. A pesar de la descripción de las debilidades fundamentales del sector, Mesa es de la opinión “que en unos años tiene que haber un cambio importante, porque se empiezan a dar condiciones favorables en ese sentido”, refiriéndose al agua. “Si en base a experiencias, se empieza a detectar que el agua depurada puede ser un agua óptima, sometida a tratamiento terciario, para determinados cultivos, su uso no tendría demasiado problemas”.