La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) considera a la acuicultura la única forma de hacer frente al futuro déficit de pescado. Esta organización estima que para el año 2030 serán necesarias 37 millones de toneladas adicionales de pescado para mantener los niveles actuales de consumo debido al continuo aumento de la población mundial.